Tras su concierto en la primera edición de Christmas by Starlite en Madrid, Manuel Turizo ha vuelto a actuar para este festival, esta vez estrenándose en Marbella, su sede principal. Pero esto no fue lo único que pudo vivirse este 17 de julio: un concierto de Marilia a bordo del tren dirección Málaga y un cierre épico con el showcase de Juan Magán completan esta jornada de Starlite Occident.
Acordes de guitarra y palmas al compás de canciones como Bailar conmigo, Cueva en el invierno y la conocida Amores de barra interpretadas por la artista conquense fue lo que se pudo escuchar en uno de los vagones del AVE que salía desde la estación madrileña de Atocha con fin en su homóloga Málaga María Zambrano.
"Vamos bastante rápido a todas partes y la hora de coger un tren nos permite parar por un momento y mirar a nuestro alrededor. En los trenes siempre he conseguido terminar canciones", aseguró Marilia durante el trayecto entre canción y canción, con las que aportó el toque musical del viaje con destino al festival.
Desde ahora, un tren vinilado por Starlite Occident viajará a Málaga a lo largo del verano. Un compromiso entre la organización del festival y Renfe para que los asistentes que viajan desde la capital llegue siempre a tiempo para los conciertos. "Estamos con la cultura y con la música. Queremos promocionarlas y que todo el mundo pueda llegar a ellas", apuntó Javier Pérez, director del Área Negocio RENFE Viajeros. "Estamos felices y muy ilusionados con esta colaboración. Creo que Starlite y Renfe es un matrimonio. Nos empezamos a conocer y a colaborar y cuanto más te gusta, más quieres aprender del otro", señalo, por su parte, Sandra García-Sanjuán, cofundadora de Starlite Occident.
Una vez llegados a Málaga y con el correspondiente traslado a Marbella, comenzó la segunda experiencia musical de la jornada. Con su nombre escrito en la pantalla y varias imágenes de su cara, Manuel Turizo saltó al renovado escenario del Auditorio Starlite Occident, que este año cuenta con un total de 60 metros de altura.
La nota, Mala costumbre, Amor en coma y Copa vacía, su tema junto a Shakira, fueron las primeras canciones que el artista colombiano ofreció a su público. Algunos de los asistentes acudieron al show con pancartas y Turizo no dudó en detenerse para leer sus mensajes con atención. Una de ellas era la de Carla, una niña de ocho años que le pedía en su escrito bailar juntos. El cantante no se lo pensó dos veces e invitó a la pequeña a subir con él para bailar El Merengue.
Tras este entrañable momento, Manuel Turizo entonó Desconocidos, Te quemaste y Los cachos, cerrando así la primera parte del concierto. Después de estas llegó la parte más sentimental del espectáculo. El artista interpretó Quiéreme mientras se pueda y Culpable. "Esta canción la escribí en cuarentena cuando pensaba que la gente se iba a olvidar de mí por no sacar música", apuntó sobre el primer tema. Después de estas dos canciones, el concierto llegó a su ecuador y el cantante puso a bailar a todos los asistentes con Vaina Loca Remix, 1000 Cosas, Déjala que vuelva, Esperándote y Vagabundo.
Ya en la recta final del show tuvo lugar uno de los momentos más emocionantes de la noche. Manuel Turizo se sentó junto a su hermano Julián, que forma parte de su banda y cantó Una lady como tú, el tema con el que dio el salto a la fama. "Al principio solamente sacábamos covers, no pensábamos que la música pudiera ser una alternativa real para nosotros. [...] De la noche a la mañana, hicimos las cosas de corazón, trabajar y hacer música porque lo sentíamos simplemente. Sacamos una canción y se terminó volviendo un hit mundial, el primero de mi carrera", fue el discurso que dio antes de cantarla.
La Bachata y El Merengue fueron las canciones con las que Turizo cerró el concierto, con las que derrochó complicidad y buena sintonía y animó a todos los asistentes a levantarse de sus asientos y echarse un baile más.
La velada terminó con un divertido after party que contó con Juan Magán como maestro de ceremonias. El público del Starlite vibró a altas horas de la madrugada y bajo las estrellas al ritmo de sus grandes éxitos tales como Bailando por ahí, Por fin te encontré o Verano azul.
Lujo gastronómico
Además de música en directo, el Starlite Occident cuenta con una amplia experiencia gastronómica. El recinto cuenta con cinco innovadores restaurantes propios en los que se pueden degustar todo tipo de sabores procedentes de diferentes lugares del mundo.
Estos son Temazo (brasería), Tanabata (propuesta Nikkei), Ánima (mexicano), Sandra’s Caviar Bar (selección gourmet de Sandra García-Sanjuán) y Raffaella (trattoria italiana), que llega como una "nueva y cautivadora ventana al Mediterráneo".
En suma y tal y como indican desde la propia organización del festival: "Starlite Occident ha reinventado el concepto y la manera de disfrutar de la música en vivo, fusionando en un espacio mágico la música, la cultura, el ocio, la gastronomía, la tecnología y la sostenibilidad. Una oportunidad para disfrutar de conciertos cercanos e íntimos de grandes artistas en una atmosfera exclusiva".
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